Fue la mujer que supo colarse en el avión y en el hotel de los Beatles para conseguir una exclusiva histórica, la que engañó a Roman Polansky adoptando una identidad falsa, la que se sonrojó cuando Clint Eastwood la besó en los labios, la que retrató a un joven y desconocido Joan Manuel Serrat, la que fue fotógrafa personal de Raphael y la que reveló los negativos de la ceremonia de los Oscars de Hollywood en el lavabo de la casa de Xavier Cugat….
Así presentan Xavier Baig y Òscar Moreno, los chicos de la productora REC, a Joana Biarnés. ¿Sabes quién es Joana Biarnés? Si la respuesta es ‘no’, sigue leyendo, porque seguro que te acaba interesando. Si la respuesta es ‘sí’, continúa también, porque seguro que vas a querer unirte a la causa. ¿Qué causa? Ahora lo cuento.
Joana Biarnés es una señora que, a primera vista, no llama la atención: una ancianita de 78 años dulce y amable, sencilla y campechana, a la que te imaginas cocinando algún plato casero como lo han hecho la mayoría de nuestras abuelas cuando éramos niños. Pero la Biarnés, aunque es una excelente cocinera, está muy lejos de quedarse con ese papel tan típico y tan tópico, sí. La historia de esta mujer es la de las adelantadas a su tiempo, las pioneras, las luchadoras. Fue la primera mujer fotoperiodista de España. Y ahora, REC busca apoyos en internet a través de una plataforma de crowfunding para rodar un documental que narre la fascinante andadura de esta pionera. Muy poca gente conoce aún su nombre, pero tiene un legado fotográfico que documenta maravillosamente una amplia etapa del siglo XX, desde la plenitud del franquismo hasta la transición y la recién nacida democracia.
Nacida en Terrassa y de padre fotógrafo deportivo, Joana quiso dedicarse a lo mismo que su progenitor desde que le ayudaba en el laboratorio. Estudió en la Escuela de Periodismo y sus primeros encargos se desarrollaron en campos de fútbol, donde vivió situaciones muy machistas porque en aquel tiempo no era habitual que una mujer sacara fotografías a pie de campo. Un día, incluso, un arbitro paró un partido porque pretendía echarla a pesar de que ella tenía todas su acreditaciones en regla. «Esto va a cambiar», amenazó ella al árbitro. Y siguió haciendo fotos pese a que la mandaron, literalmente, a fregar , contaba ella en su visita al seminario de fotoperiodismo de Albarracín el pasado octubre. Y al final el partido prosiguió.
Joana Biarnés siempre habla de su padre con tremendo respeto y devoción. Cuando visitó, el pasado octubre, el seminario de fotoperiodismo de Albarracín para enseñarnos una proyección con lo mejor de su obra, nos contó varias anécdotas en las que su padre aparecía por algún lado siempre. Por ejemplo, cuando tuvo que llevar unas fotos a Barcelona de la riada de Terrassa, allá en 1962. Su padre le dijo: «Arréglatelas, reportera», ya que no había manera de llegar con semejantes inundaciones. Y ella se las apañó parando a un camionero que la llevó hasta la capital. Al poco tiempo, el diario Pueblo le propuso trasladarse a Madrid para que pasara a formar parte de su plantilla de fotógrafos. Cuando le pidió a su padre la bendición, este le dijo que lo único que le pedía es que no le hiciera agachar la cabeza. «Este ha sido mi leit motiv«, reconoció.
También de su padre le dijo «Tú primero dispara y luego pide permiso», y así consiguió unas fotos exclusivas de los Beatles la primera vez que visitaron España. No solo se las apañó para colarse en su avión y tirarles fotos desde el baño. La pillaron y la echaron, y ella se fue al hotel. Sabía, por un contacto, cual era la suite donde se alojaba el cuarteto, así que subió por el montacargas y, sin ninguna vergüenza, llamó a la puerta. Abrió Ringo y ella, ni corta ni perezosa, se metió en la habitación de golpe. Al final estuvo con ellos tres horas. No tenía ni idea de hablar inglés, pero se las arregló para responder las preguntas que la hacían sobre butifarras, guitarras españolas y flamenco. Y mientras, les fusiló a fotos. «Disparaba sin flash y los Beatles pensaron que no me iban a salir las fotos», explicó en Albarracín ante un auditorio totalmente entregado a sus anécdotas.
Biarnés ha vivido anécdotas muy curiosas, pero una de las más llamativas ocurrió cuando tuvo un cachorro de elefante alojado en la terraza de su piso de Madrid. Se lo regaló un admirador de Marruecos y lo hizo llegar hasta su piso de la capital. Lo tuvo un par de días en casa y al final lo donó a un zoológico por razones obvias. Vivió mil y una aventuras hasta que un día, a finales de los años ochenta, decidió dejar el fotoperiodismo, frustrada tras comprobar cómo se estaba desvirtuando su oficio. «Lo dejé cuando un editor me dijo que lo que vendía era una foto de Lola Flores y compañía vestidas de reinas magas», reconoció en Albarracín.
Desengañada, decidió empezar de cero y se cambió de oficio como quien se cambia de ropa. Abrió el restaurante Cana Joana en Ibiza, y también alcanzó un gran éxito en este campo ya que llegó a obtener una estrella Michelín. Trabajó en él hasta que jubiló, hace unos años.
Sus fotos, mientras, cayeron en el olvido. Casi nadie conoce a Biarnés ni su ingente obra, la mayoría aún sin catalogar, aunque ya se está trabajando en ello. Desde el año pasado, se han puesto en marcha la maquinaria para que la obra de esta excelente fotoperiodista no caiga en el olvido. Gervasio Sánchez nos la dio a conocer en Albarracín. En este seminario, su editor, Cristobal Castro, anunció una exposición «importante» para 2014 con parte de su obra. Y al mismo tiempo, los chicos de REC están buscando reunir los 10.000 euros que les faltan para rodar un documental de 60 minutos para colocar a la Biarnés en el lugar que le corresponde del olimpo fotoperiodístico.
Para colaborar, solo tenéis que ir a la página desde la que se ha lanzado la campaña promocional del documental y elegir la aportación que cada uno quiera/pueda hacer. Quedan solo dos semanas, os animo a todos a aportar vuestro granito de arena porque este docu puede ser toda una bomba.
Hola Lola, ¡qué sorpresa más agradable nos hemos llevado al ver que habías escrito sobre esta gran mujer. También nos alegramos de que el proyecto de verkami haya conseguido la financiación necesaria. Un fuerte abrazo desde Focus On Women.
Gracias Amaya, es una tía que lo vale!