Estoy en Albania y hoy cumplo 27 años. Hasta hace unas pocas semanas, jamás hubiera imaginado que este cumpleaños fuera a pasarlo en un lugar tan extraño para mi, tan lejos de los míos. Yo me veía en el bar de Andrés, con los colegas bebiendo cerveza, como debe ser.
Pero no, estoy en este país balcánico y no habrá mucho tiempo para celebraciones, tengo una importante misión por delante. Junto a mi dire, Alberto, comenzamos el rodaje de un documental sobre el Kanun, un antiguo código de leyes albanés que hoy en día sigue rigiendo la vida de muchas personas y por culpa del cual un buen número de ellas vive bajo amenazas de muerte sin poder salir de su casa, ya que este código permite que la familia que haya sufrido la pérdida de uno de los suyos por asesinato pueda cobrarse la deuda de sangre en los familiares del asesino, aunque ellos sean inocentes.
La nueva fase de esta aventura comenzó hace una semana, cuando yo estaba tranquilamente disfrutando de unos días de descanso en Ibiza y Alberto me llamó para decirme: “nos vamos”. Desde entonces, no he parado ni para descansar. Los últimos días han sido un torbellino de preparativos, carreras, recados, llamadas, equipajes, planes…

El dire, tope feliz, con una furgoneta del año catapún / ©Lola Hierro
Por fin el jueves, con tres horas de sueño en el cuerpo, nos embarcamos a las seis de la mañana en un vuelo con destino Roma. Una vez llegados allí teníamos doce horas por delante, hasta el siguiente paseo hasta Tirana. Así que nos fuimos por ahí. He de decir que Italia es cara y su capital más. Desde el aeropuerto de Fiumicino la opción más económica para llegar a la capital es un autobús que cuesta ocho euros. Aquí ejercí por primera vez mis dotes de “conseguidora”, ya que, como no me daba la gana pagar ese dineral, se me ocurrió hacer auto stop. Y hubo suerte! Tras unos cuantos intentos fallidos (qué bordes son los italianos, por dios…) y cuando ya me estaba sintiendo muy frustrada con mi técnica de cara de tonta y levantamiento de ceja resultona, encontré a una señoruca , una auténtica mamma romanesca de 60 castañas, que nos hizo el favor de llevarnos en su coche.

El hijo de la señora que nos llevó en su coche. ¡Romanesco total!/ © Lola Hierro
Sin mucha novedad en la capital romana: piedras antiguas, turistas, calor, pasta, pizza, gelatti… Anduvimos por el centro, comimos, pateamos y cuando se acabó el tiempo nos volvimos a Fiumicino, esta vez pagando, claro.
El vuelo a Tirana ha sido de todo menos tranquilo. Primero se retrasó, y luego tuvimos un pequeño percance que a mi casi me mata del susto: justamente al aterrizar, cuando el avión iba a tomar tierra, de repente volvió a elevarse. Lo que ocurría, al parecer, es que no había en el aeropuerto de Tirana luces en la pista para que pudiéramos aterrizar, y ya era de noche. El piloto tuvo que darse una buena vuelta por los aires hasta que pudimos descender, y aterrizó un poco al tun tun, ya que no tenía apenas referencias y aquí el GPS y esas moderneces no se usan. Esa fue mi bienvenida a Albania. ¡Welcome to the Jungle!
Pero la cosa no acaba aquí, ya que al abrir las maletas nos dimos cuenta de la tercera razón por la que nunca más volaremos con Belle Air, la compañía aérea que nos ha traído: nos han abierto el equipaje y ha desaparecido una pieza del equipo de grabación. En un rato vamos a vaciar todas las maletas para buscarla bien, pero muchos nos tememos que nos la hayan robado, porque ayer ya revolvimos todo sin resultado y porque el interior de la maleta estaba hecho un caos, se nota que han metido la mano.

Es Roma… / © Lola Hierro
Por lo demás, estamos muy bien. Lo único que ocurre es que no puedo llamar porque mi móvil no da señal y porque además cuesta más de un euro el minuto, así que no es plan. Me comunicaré por email y por este blog.
Y esto es todo por hoy. Nos ponemos en marcha. Seguiremos informando.
Textos sobre el primer viaje a Albania:
- Filming in Albania: Un cumpleaños balcánico
- Filming in Albania: La difícil tarea de establecerse
- Filming in Albania: ¡Habemus bebé!
- Filming in Albania: ya estamos de entrevistas
- Filming in Albania: Muchas emociones
- Filming in Albania: Entrevista con un ¿asesino?
- Filming in Albania: Aprenda albanés en cuatro días
- Filming in Albania: Persiguiendo la noticia
- Filming in Albania: Live fast, die hard…
- Filming in Albania: Tengo un dèja vu
- Filming in Albania: Vuelta a casa. Faleminderit, Shqiperia
Más relatos sobre el segundo viaje a Albania:
- ¿Volverá ‘Filming in Albania’?
- Filming in Albania: Del barco a la cama
- Se acabó lo que se daba
- San Valentín a la albanesa
- Albanian sagas: De mercadeo
- Las madres de Tirana
Textos sobre mi tercer viaje a Albania:
BONUS: Las fotografías del viaje
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Pingback: He soñado a la muerte, y ha venido | Reportera nómada
Pingback: Albania, cuánto me dueles | Reportera nómada
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Suerte en el inicio de esta nueva ruta, seguiremos vuestro recorrido. Animo!!Besos.
hala lola… cómo mola todo :)aventurera! no sabia que era tu cumpleee. bsss mil