Filming in Albania: Aprenda albanés en cuatro días

Queridos todos:

Hoy voy a hablaros de una de las mayores dificultades que me he encontrado en Albania a la hora de rodar este documental: el idioma.

Qué fácil es saber español e inglés y moverse por Europa, ¿verdad? Uno no cae en la cuenta de lo importante que es la comunicación verbal (y la no verbal, dadas las circunstancias) hasta que llegas a un sitio como éste y te das cuenta de que no te queda más remedio que hacer un curso intensivo de Shqip si quieres sobrevivir.

Niño con traje tradicional albanés. / (C) Lola Hierro

Y el shqip, amigos, no es nada fácil. Es la lengua que viene de los ilírios, antiguos pobladores de gran parte de los Balcanes, y como el griego, es una rama independiente de las lenguas indoeuropeas,  pero además se ha influenciado mucho por el latín y el turco. Por ejemplo, tiene casos y declinaciones,  los verbos tienen –creo- 21 tiempos y se conjugan como el español, vamos, que no vale aprenderse uno y ponerlo detrás de cada pronombre sino que según hables de tú, él o nosotros, va un palabro u otro.

Lo fácil es que la estructura de las oraciones es la misma que en español, es decir, no fuerza el orden de las palabras como en inglés, puedes alterar el orden de la frase para dar más relevancia a un elemento u otro. También hay palabras parecidas a las nuestras,  hay anglicismos… pero en general es difícil de aprender, imposible de escribir y peor de pronunciar.

Fatos es uno de mis profesores de Shqip. / (C) Lola Hierro

A pesar de tanta traba, yo he conseguido hacerme con unas nociones mínimas para poder desenvolverme cuando no tengo a nadie cerca que hable inglés, italiano, español o francés. Y no es la primera vez que me pasa. Ayer se dio un ejemplo muy claro. Me perdí. Bueno, no me perdí, digamos que se olvidaron de mi en una cafetería pensando que estaba en casa. Cuando me di cuenta quise llamar a Alberto, al que imaginé preocupadísimo pensando que me habrían secuestrado unos terroristas albano kosovares, pero no tenía el móvil encima. Sólo llevaba mi cuaderno de notas y en él venía apuntado el número de Fatos, nuestro amigo periodista, que no habla inglés y con el que nos comunicamos en medio italiano y medio shqip. Así que le llame desde una cabina y mi recado fue el que sigue:

Fatos, si je? Une jam Lola, une jam mirë, une jam në Sky Tower tani. Nuk kam telefon e Alberto. Flash Alberto shkoj te lutem. Faleminderit. Miropafshim.

Y significa: Fatos, cómo estás? Soy Lola, estoy bien, estoy en la Sky Tower ahora. No tengo el teléfono Alberto. Di a Alberto voy te lo ruego. Gracias. Adiós.

Y Alberto me encontró porque me hice entender con ese shqip de indios. No está bien dicho pero es lo que sé… para diez días ni tan mal.

Los niños del barrio de Rabje hablan solo shqip. / (C) Lola Hierro

En realidad, no he estudiado el idioma en plan sentarme con un método y ponerme a hincar codos. Sólo lo hice el primer día, en una mañana con poco trabajo. Durante una hora me aprendí los números del uno al diez (nje, dy, tre, kater, pesë, gjastë, shtatë, tetë, nentë, djetë) y el presente indicativo del verbo ser/estar, además de unas cuantas fórmulas de cortesía en plan mirëdita (buenos días), mirembrëma (buenas tardes), natën e mirë  (buenas noches)… También me aprendí la frase mágica para un fotógrafo: Mund ta marrë nje foto? (¿Puedo hacer una foto?), así como a señalar drejtes (todo recto), majtas (izquierda) y djathtas (derecha).

Albania, todo Mercedes y banderas. / (C) Lola Hierro

La suerte que tengo es que estoy todo el día rodeada de burra y vajzë shqiptare (hombres y mujeres albanesas) a los que escucho y con los que me intento comunicar en su idioma. Llevo conmigo un fjalor (diccionario) y aunque tardo diez años en construir una frase, algo voy avanzando. Amén de que aquí a todos les hace mucha gracia mi acento y mi empeño por aprender. Agradecen mucho que uno se interese por hablarles en su lengua.

Así, gracias a Fatos, he aprendido a contar hasta el número mil, y otro amigo, Berti, me ha enseñado palabras como pëmë (árbol), gjethe (hoja), triko (jersey),  fund (falda) y çanta (bolso) o syze (gafas), makina (coche) y lulë (flor). No es que tengan mucho uso, me las sé porque yo me he aprendido el “si quhet” (¿cómo se llama…?) y voy por la calle con ellos señalando a todo lo que veo, y ellos me enseñan. La verdad es que es muy entretenido.

Karmela, preciosa por dentro y por fuera, nos hace de traductora. / (C) Lola Hierro

Poco a poco me empiezo a manejar, y aunque tengo mucho lío con los verbos, ya se me quedan los importantes: une punoj (yo trabajo), une ha (yo como), une pi birra (yo bebo cerveza), une jam ( yo soy, importante para decir que une jam gazeter, que es yo soy periodista), Belena, gjum! (Belena, duerme!), une shkoj (yo voy, como por ejemplo decir “une shkoj  tek shtëpia ime”, vamos, que te vas para casa), une dua (yo quiero, como une dua nje molë -> quiero una manzana) o une kam (yo tengo y también usado para decir si kam o nuk kam, es decir, hay o no hay) o une mendoj (yo pienso que…). También me cuestan el çfare, kur, ku, kush…(qué, dónde, cuándo, quién…), es una de mis asignaturas pendientes.

Jose,  que me ha corregido este post y me ayuda muchísimo con el shquip./ (C) Lola Hierro

También, si quieres hacer la gracia y ganarte a alguien, le pones cara de tonta y dices: Alberto nuk do une ha chokolad sepse ai mendon une jam si nje lopë (Alberto no quiere que coma chocolate porque él piensa que estoy como una vaca), y ya los tienes a todos en el bolsillo diciéndote lo bukur (guapa) que eres.

Y por supuesto, la frase mágica para evitarse problemas: sonrisa de oreja a oreja y shumë mirë (muy bien, o muy bueno, o mucho bueno, a saber..) o el también muy socorrido Nuk kuptoj (no entiendo).
Y hasta aquí mis conocimientos de shqip. Seguiremos informando, pero en castellano, desde luego. Puth! (Besos!)

Textos sobre el primer viaje a Albania:

  1. Filming in Albania: Un cumpleaños balcánico
  2. Filming in Albania: La difícil tarea de establecerse
  3. Filming in Albania: ¡Habemus bebé!
  4. Filming in Albania: ya estamos de entrevistas
  5. Filming in Albania: Muchas emociones
  6. Filming in Albania: Entrevista con un ¿asesino?
  7. Filming in Albania: Aprenda albanés en cuatro días
  8. Filming in Albania: Persiguiendo la noticia
  9. Filming in Albania: Live fast, die hard…
  10. Filming in Albania: Tengo un dèja vu
  11. Filming in Albania: Vuelta a casa. Faleminderit, Shqiperia

 Más relatos sobre el segundo viaje a Albania:

  1. ¿Volverá ‘Filming in Albania’?
  2. Filming in Albania: Del barco a la cama
  3. Se acabó lo que se daba
  4. San Valentín a la albanesa
  5. Albanian sagas: De mercadeo
  6. Las madres de Tirana

Textos sobre mi tercer viaje a Albania:

  1. He soñado a la muerte, y ha venido
  2. Albania, cuánto me dueles

BONUS: Las fotografías del viaje

10 respuestas a «Filming in Albania: Aprenda albanés en cuatro días»

  1. Pingback: Albania, cuánto me dueles | Reportera nómada

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