A esta niñuca aún no la he presentado en el blog. Se llama Belén, alias Panchita, y tiene tres años -casi cuatro-. Sin darme yo cuenta, se me ha hecho mayor.
Este año no me ha dado tiempo a currarme una foto original así en condiciones, como la del Santa Claus en bañador del año pasado. Así que he cogido a la princesa por banda y nos hemos retratado para desear al mundo unas felices navidades, solsticio de invierno, comilona, borrachera, reunión con los seres queridos, con la familia en caso contrario…. ¬¬’ En fin, lo que se tercie.
Hay mucha gente a quien no le gusta la navidad. A mi no me hace especial gracia. Pero si tenéis niños en casa, dejaos llevar un poco por la tontería de estos días, por lo menos cuando estén ellos delante. Se ilusionan tanto los pobres… Yo llevo toda la mañana poniéndome disfraces varios y haciéndome fotos que espero nunca salgan a la luz. Y mi princesa está feliz porque su «hada madrina» (ostento ese honor) ha venido unos días y aquí todo el mundo se ha juntado para hacer comidas ricas, adornar la casa y dejarle hacer el mal sin regañarla, como otras veces.
Así que en esas me quedo, con la corona de princesa, el cordero diciéndome «hola» desde el horno y la familia atestando la casa. Feliz… ¡lo que sea!
Feliz lo que sea para ti también. Si que es un gusto enredar con os pequeños de la casa en navidad. P.D. Yo quiero ver esas fotos de disfraces jejejje